Tras los muros está la peste,
el terror, la muerte, la muerte... y yo camino en la otra calle con la capucha negra de siempre buscando con quien desahogar mi rabia, Buscando encontrar mi presa. Suburbios, siempre han sido así extraordinarios, siempre misteriosos. Y desde la otra calle, chicos de palidez aspecto me saludas con desapego. saben que no regalo chicles ni caramelos. Ente los muros está la vida, la esperanza, lo divino, lo bendito. Y nosotros solo somos máquinas (ministros de muerte) en esta selva de alquitrán y edificios demolamos. Y nosotros en estas calles impredecibles caminamos sin rumbo hacia la predicción. Somos seres confusos en el limbo, almas errantes en la cumbre del mal de esta ciudad putrefacta que muere lentamente envenenada. Hoy tenemos sed, sed de sangre... limpiaremos las calles del pecado derribaremos cualquier barrera levantada contra sus moradores. Practicaremos la homeopatía como método de cura pasa sus almas. Luis NSUE MIA poesía breve (homeopatía)
0 Comentarios
Deja una respuesta. |
Cristian Eteo B."¡Vuestra pluma nos hará libres!" Archivos
Mayo 2020
PoesíaNarrativa |